Cuando el paciente tiene la Palabra

Resumen

La enfermedad provoca en el ser humano una confrontación con su debilidad, su vulnerabilidad y su finitud. Hace dos mil años, Jesús de Nazareth sanaba los cuerpos, pero también las almas de quienes se le acercaban buscando recuperar la salud. Con seguridad, lo hacía porque más allá del alivio físico se proponía transformar las conciencias, liberar, restituir la dignidad, humanizar al sufriente. Hoy, no obstante los grandes descubrimientos y avances de las ciencias, las cosas no han cambiado. El ser humano actual también siente angustia y temor ante las circunstancias que padece cuando está enfermo. Particularmente, en Colombia, el Sistema de Salud, difícilmente, responde con calidad y oportunidad y el personal médico
se tornó pragmático, indiferente, hostil. Es decir, perdió humanidad y urge recuperarla. Hace 10 años, Cali identificó el problema y asumió el reto de defender los derechos de los pacientes maltratados por las entidades responsables de la salud, una labor inspirada en el deber de estar a lado de quien siente vulnerada su dignidad. Un modelo de atención que con voluntad política se puede implementar en otros territorios para lograr una Colombia más sana y con mayor calidad de vida.